Dos empresas valencianas desarrollan una iniciativa pionera en Europa con la que por 650 euros se puede conservar la información genética de un familiar fallecido
M. J. CARCHANO/ VALENCIA
Un trabajador de la empresa Sistemas Genómicos muestra el tubo donde se guarda la muestra de ADN.
Conservar el ADN de un familiar fallecido ya no es una utopía. Los avances en la investigación de las enfermedades genéticas han abierto un mundo de posibilidades en la búsqueda de curas.
Un acuerdo entre dos compañías valencianas, Sistemas Genómicos y Parque de la Paz, permitirá guardar la información genética de un ser querido para estudiar enfermedades hereditarias, prevenir patologías e incluso servir a la justicia. Por ejemplo, en una prueba de paternidad.