CORDOBA, dic 14 (DyN) – Pruebas genéticas confirmaron hoy la paternidad de un comerciante de 60 años sobre la niña que fue asesinada al nacer por su madre en la localidad de San Javier, lo cual corrobora la acusación por abuso sexual contra el hombre.

El fiscal Emilio Andruet reveló hoy que «el resultado del estudio de ADN ha arrojado positivo» entre el comerciante Arturo Benavídez y la niña muerta.

«Es decir que se ha determinado la paternidad por parte de la persona que yo tengo detenida en relación a ese hecho de supuesto abuso sexual», añadió el fiscal.

La madre de la niña, una joven de 19 años, fue absuelta el 28 de noviembre por la Cámara del Crimen de Villa Dolores, 100 kilómetros al sudoeste de esta capital, que admitió que se encontraba «en estado de inconciencia» cuando mató a golpes a la recién nacida.

La coincidencia entre el código genético de Benavídez y las muestras extraídas del cadáver de la niña fue considerada por el fiscal Andruet como una «prueba fundamental».

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